TRABAJO TEMPORAL

Por todo lo expuesto, es importante saber qué implica el trabajo temporal y cómo llevarlo adelante correctamente. La Organización Internacional del Trabajo define al empleo temporal como aquel donde los trabajadores son contratados por un período de tiempo específico, e incluye los contratos de duración determinada, basados en proyectos o en tareas, así como el trabajo ocasional o estacional, incluido el trabajo por días. En esta misma línea se explaya Schellhas: “Se entiende genéricamente como trabajo temporal a aquellos empleos que tienen un plazo de duración específico y determinado de antemano, a diferencia de las contrataciones tradicionales que se realizan por tiempo indeterminado. Dentro de este paraguas existen diferentes formatos de contratación. Por ejemplo, podemos mencionar los contratos de temporada o los contratos a plazo fijo ligados a un proyecto en particular. Por otro lado,  hay que diferenciar los casos en los que las empresas contratan en forma directa al trabajador que necesitan, mientras que en otros casos las compañías recurren a empresas especializadas en servicios de recursos humanos, expertas y especialmente habilitadas para proveer personal eventual que cuenta con un formato de contratación y una regulación muy específica”.

QUÉ ASPECTOS CONSIDERAR

Llegó el momento en que la empresa necesita un trabajador temporal: ¿Cómo darle forma? ¿Qué pasos seguir? Según explica Schellhas, en el caso de las contrataciones directas por parte de las empresas, como en todo proceso de reclutamiento, es muy importante la definición previa del perfil de búsqueda para que ese proceso de búsqueda y selección asegure el mejor match entre las necesidades de la compañía y las habilidades y competencias del trabajador que va a cubrir esa posición. En el caso de las contrataciones a través de una empresa de servicios eventuales, lo más importante es elegir una compañía debidamente habilitada por la regulación y que a su vez cuente con el respaldo económico y financiero para hacer frente a cualquier contingencia que pueda presentarse en relación con las obligaciones del vínculo laboral. “Es fundamental que la empresa de servicios de recursos humanos cuente con un equipo de reclutamiento profesional y experimentado, con consultores que conozcan los perfiles más demandados de cada industria y mercado vertical y una base de candidatos precalificada. También que disponga de las mejores herramientas y aplicaciones digitales de reclutamiento para asegurar el cubrimiento de las vacantes en forma ágil y rápida, teniendo como objetivo un triple match de los candidatos seleccionados para que se adecuen al perfil requerido, a la cultura de la organización para la cual se desempeñarán y al jefe al que reportarán”, argumenta. 

QUÉ SUCEDE CON LA CAPACITACIÓN

Un tema que a veces inquieta es cómo capacitar a un nuevo trabajador cuando la variable tiempo no entra en la ecuación. Como explica Schellhas, en las contrataciones temporarias es clave la velocidad, tanto para cubrir la posición, como para que el personal pueda asumir su rol laboral en un muy corto plazo. “En este contexto, la clave del éxito de ese proceso está en la etapa del reclutamiento, partiendo de la base de datos de candidatos precalificados para encontrar el postulante que tenga las competencias, habilidades, formación y experiencia necesarias para el trabajo que tiene que hacer, de modo que pueda comenzar en sus funciones con un lapso muy corto de inducción. Ese es uno de los principales aportes que hacen las compañías como Randstad que se dedican a reclutamiento y selección de personal temporario especializado en todo el mundo”, concluye el especialista. 

Más información en www.randstad.com.ar