No es lo mismo que un resfrío. La prevención es el mejor camino para evitar el contagio.
La gripe no es un resfrío y eso debe quedar claro. Es una enfermedad causada por el virus de la influenza y te obliga a estar tirado unos cuantos días en la cama, tapado hasta el cuello. “Los síntomas son fiebre de inicio súbito; tos (por lo general seca); mialgias (dolor muscular); artralgias (dolor articular); cefalea, dolor de garganta y abundante secreción nasal. Su duración, por lo general, va de 1 a 2 semanas”, detalla Zsauter. Y agrega que si bien muchas veces los síntomas ceden con tratamiento sintomático y reposo; en personas de alto riesgo puede ser grave e incluso mortal.
MÁS VALE PREVENIR QUE CURAR
Sin lugar a duda la vacunación anual es el mejor modo de prevenir esta enfermedad. “La vacuna es protectora y, si bien en ancianos y algunas personas (un número muy bajo) puede ser menos eficaz para prevenir la enfermedad, actúa reduciendo la gravedad y la incidencia de complicaciones y muerte”, explica Zsauter. Pero, ¿todos debemos vacunarnos? La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda vacunación anual en las siguientes personas:
-Embarazadas
-Niños de 6 meses a 5 años
-Mayores de 65 años
-Pacientes con patologías crónicas
-Profesionales sanitarios
“Yo sumo a esta lista a toda persona que pueda llegar a estar expuesta por acompañar pacientes de riesgo, personal de escuelas y transportistas”, dice Zsauter.
Además de la vacunación hay otras medidas preventivas de protección personal que todos podemos llevar adelante, tales como: lavarse las manos frecuentemente, mantener buena higiene respiratoria (cubriéndose la boca y nariz al toser con el antebrazo; o estornudar con pañuelos descartables y desecharlos correctamente); autoaislarse rápidamente al comienzo de los síntomas; evitar el contacto con personas enfermas, evitar tocarse ojos, nariz y boca.
Por último, Zsauter asegura que la gripe es de fácil propagación porque el contagio se produce cuando la persona enferma al toser o estornudar dispersa en el aire, hasta una distancia de 1 metro, gotitas con virus infectando a las personas cercanas que inspiran esas gotas. Y también se propaga por las manos contaminadas, por eso es tan importante el correcto y frecuente lavado de manos.
¿POR QUÉ VACUNARSE TODOS LOS AÑOS?
El virus de la gripe o influenza sufre mutaciones, es decir pequeños cambios, todos los años. Por tal motivo las vacunas se revisan periódicamente y la OMS define las nuevas cepas que se agregarán en las vacunas de cada temporada. Si estás entre las personas de riesgo, no olvides vacunarte cada año.