Malos hábitos que pueden dañarlo.
Si bien el parque automotor nacional ha ido sumando autos con caja automática, en la Argentina la caja de cambios manual sigue estando muy arraigada. Un elemento clave de la caja manual es el embrague, pedal que debemos pisar cada vez que necesitamos hacer un cambio de marcha o frenar. La RAE define como “Embrague” al dispositivo que permite acoplar o desacoplar dos ejes de una máquina, especialmente cuando está funcionando. En el caso de los vehículos esa máquina es el motor del auto y la función del embrague es desacoplar temporalmente el motor de las ruedas, permitiendo cambios de marcha y detener el vehículo sin que se apague el motor. Su función es clave y, por lo tanto, preservarlo y cuidarlo es mandatorio. Si bien sufre un desgaste propio del uso –como todas las piezas del auto– hay ciertos hábitos “inconscientes” que realizamos varios conductores y que se convierten en errores que pueden ocasionar un desgaste prematuro y un mal rendimiento del auto. ¿Qué errores comunes se cometen al usar el embrague? ¿Qué pasa si mantengo el pie en el pedal del embrague? ¿Qué impacto tiene un uso inadecuado del embrague?
USO INCORRECTO
Como explicamos más arriba, con nuestro estilo de conducción podemos hacer que esta pieza clave en el funcionamiento de la caja de cambios manual tenga mayor o menor vida útil. Estos son los errores que hay que evitar:
- ARRANCAR LA MARCHA DE MANERA BRUSCA. Si arrancamos nuestra conducción bruscamente esto hace que tengamos que soltar el embrague de golpe y se ejerza una rápida presión sobre el disco del embrague ocasionando una gran fricción que lleva luego al desgaste del sistema de embrague. Por lo tanto, es siempre recomendado realizar arranques de transición suave.
- DEJAR PISADO EL PEDAL DEL EMBRAGUE CONTINUAMENTE. Aunque solo se trate de una leve presión o dejar apenas apoyado el pie sobre el pedal. Cuando no estamos usando el pedal, el pie debe quedar en el “apoya pie” que está para ese fin. Dejar el pie apoyado es un error muy común en las ciudades donde el tráfico y las continuas detenciones hacen que los cambios de marcha sean muy frecuentes.
- NO PISAR EL PEDAL A FONDO (O PISARLO “A MEDIAS”). Para los cambios de marcha siempre el pedal del embrague debe pisarse a fondo. Al pisarlo a fondo el disco se apoya por completo y de manera uniforme. Si no lo pisamos en su totalidad, por el contrario, se dan fricciones continuas en las piezas generando un mayor desgaste.
- PRESIONAR EL EMBRAGUE EN RETENCIONES O SEMÁFOROS. Cuando frenamos hay que poner punto muerto. Esto es así y no hay discusiones. Si dejamos el embrague apretado en un semáforo o embotellamiento estamos contribuyendo a un desgaste innecesario del embrague.
La próxima vez que te subas a tu auto prestá atención a estos hábitos arraigados que, a lo mejor, estás realizando de manera inconsciente.