LA SUERTE NO ESTÁ ECHADA

Todas estas frases no hacen más que darle un status de superpoderosa a la suerte, como si las personas no tuviéramos nada que hacer al respecto. Para Nicolás José Isola, Coach Ejecutivo & Storyteller, filósofo y máster en educación, hay que estar en forma, pensar lo nuevo, tener una estrategia y la suerte llegará. Hay que estar listos siempre. ¿Pero qué es entonces la suerte? “La suerte es esa oportunidad, esa ventaja mínima que se abre; ese hueco entre los adversarios para ir corriendo a marcar el gol. El hueco no está allí, hay que saber verlo”, detalla. Y agrega que la suerte existe y aparece cada vez más seguido especialmente cuando se tiene talento. Aparece cada día, a cada rato. 

Por lo tanto, es una falacia afirmar que la suerte ya está echada y que no podemos hacer nada al respecto. Cuando somos profesionales, nosotros hacemos que la suerte caiga en nuestras manos. 

TRABAJAR, CAPACITARSE Y ESTAR ATENTOS

Somos hacedores de nuestra suerte. Podemos construirla con cada acción y decisión que llevamos adelante. 3 consejos para traer la suerte a nuestras manos:

1. TRABAJAR. En el sentido más amplio de la palabra. Trabajar en nosotros mismos; en nuestro desarrollo tanto personal como profesional. Construir nuestro camino a fuerza de trabajo.
2. CAPACITARSE. Instruirnos desde lo académico, actualizándonos al mundo de hoy, pero también capacitarnos en otras áreas que no sean base de nuestra profesión. Desarrollar la inteligencia emocional, es clave en este punto.
3. PRESTAR ATENCIÓN. Mirar todo el tiempo el ecosistema que nos rodea y un poco más allá. No quedarnos con el árbol, sino mirar el bosque. Escuchar y estar atentos a todo es llave absoluta para traer la suerte a nuestras manos.

Como explicamos, somos las personas quienes les podemos dar ese empujón a la suerte para que llegue a nuestras manos. Ese plus que marca la diferencia a quedarnos esperando que las cosas sucedan. “El cambio favorece a los que están en movimiento”, James H. Austen.