EL FUTURO DE LA MOVILIDAD

La pandemia trajo un cambio importante de la movilidad en la Argentina y en todas las grandes ciudades del mundo. La movilidad se detuvo casi por completo en el planeta entero como nunca en la era moderna. El uso del transporte público fue el que más bajo (debido a las restricciones y el miedo a compartir un espacio cerrado) y, en contrapartida, creció el uso del auto particular (que venía en baja). Pero también subieron las opciones más saludables como la bicicleta o simplemente caminar. ¿Qué se viene de aquí en más y qué cambios llegaron para quedarse? El trabajo remoto sigue y seguirá siendo una realidad para muchos y, por consiguiente, menor es y será el traslado para llegar a los lugares de trabajo. Según el último estudio Mobility Futures 2021 realizado por la consultora global Kantar y que se basó en la opinión de más de 9500 residentes de 13 de las ciudades más grandes del mundo, se advierte que la pandemia es casi la causa exclusiva en la baja de desplazamientos realizados y revela una clara tendencia global hacia la movilidad sostenible. El informe también deja ver que la movilidad es un aspecto crucial para las grandes ciudades y que involucra varias aristas como medio ambiente, calidad de vida, inversiones etc. A su vez es clave entender que cuando hablamos de movilidad urbana nos referimos a la totalidad de desplazamientos que se realizan en una ciudad.

HACIA DÓNDE VAMOS

Hay una clara tendencia al localismo apoyado en el incremento del trabajo remoto y la preferencia de elegir medios sustentables como la bicicleta. Es decir, moverse menos y hacerlo en trayectos cortos. Esto representa un desafío también para las ciudades. Los países más desarrollados, en general, cuentan con mayores herramientas e infraestructura: como red potente de ciclovías, transportes más eficientes, etc. Por otro lado, la transición a vehículos eléctricos parece impostergable, aunque hoy en la Argentina estamos muy lejos. En el 2020 solo se patentaron 3800 vehículos de este tipo, mientras que, en Alemania, por ejemplo, 3 de cada 10 vehículos vendidos fueron de este tipo. Incluso en varios países ya se han fijado fechas de caducidad para la venta de autos nuevos que utilicen combustibles fósiles. No hay otro camino: los automóviles serán eléctricos o autónomos (estos últimos en las ciudades más desarrolladas, sobre todo) y utilizarán nuevas tecnologías digitales y soluciones energéticas aún en desarrollo. Hay un movimiento acelerado hacia ciudades más verdes con medios de transporte más saludables que no dejan huella de carbono.

En la Argentina, las bicicletas y los monopatines eléctricos cada vez van ganando más lugar y todo parece indicar que así se sostendrá. El paso siguiente es crecer y evolucionar en los autos eléctricos.