Requisitos, datos y todo lo que necesitás saber sobre este acto tan importante.
A continuación, se entrega un cuestionario para ser completado por el donante y se le brinda información que tiene que leer antes de ser examinado. “Una breve entrevista médica permite evaluar el estado del donante y descartar riesgos, ya sea para quien dona como para la persona que a futuro recibirá esa sangre. También se chequea el peso, frecuencia cardíaca, temperatura y se evalúa con un pinchazo en el dedo si es adecuado su nivel de hemoglobina.
En caso de ser aceptado como donante, se firma un consentimiento y se pasa a la sala de extracciones donde, con todo material estéril y de un solo uso, se realiza la extracción de sangre. El procedimiento de donación dura de 10 a 15 minutos. Luego, se pasa a tomar un refrigerio donde el donante debe permanecer unos minutos a fin de verificar su buena tolerancia. Posteriormente, la sangre es estudiada para verificar que sea segura para su transfusión. En caso de detectar algún valor fuera del rango normal, el donante es citado para ser informado al respecto. Es por eso por lo que es necesario que los datos consignados al ingreso (domicilio, teléfono y correo electrónico) sean correctos”, explica y detalla el proceso.
Ahora, si es algo tan simple y sencillo. ¿Por qué la gente no dona? “Mucha gente no dona porque no comprende la necesidad de hacerlo en forma habitual y solo lo haría si se le pide puntualmente para un conocido. Otras personas temen poder contagiarse algo a través del procedimiento de donación, hecho totalmente imposible. En definitiva, por desinformación. Los países que han logrado una cantidad adecuada de donantes de sangre que concurran por lo menos una vez al año en forma habitual, lo han hecho destinando recursos a la promoción de la donación, con equipos multidisciplinarios (comunicación, educación, psicología, etc.) y poniendo a disposición los medios masivos de comunicación. Sin duda, es un cambio cultural y por lo tanto requiere tiempo y recursos”, argumenta.
USOS, PROCEDIMIENTOS Y REQUISITOS
No es un eufemismo: la sangre salva vidas. Como indica Fernández, por cada donación una media de tres personas puede beneficiarse. La sangre actualmente se fracciona en sus componentes: glóbulos rojos, plaquetas, plasma y crioprecipitados (factores de coagulación). No solo se emplea en grandes cirugías o en personas accidentadas, sino que hay una importante cantidad de enfermedades que requieren del apoyo terapéutico de alguno de estos hemocomponentes para restaurar la salud. Es conocido el caso de leucemias o ciertos tipos de cánceres que requieren un número elevado de transfusiones de plaquetas para evitar una hemorragia espontánea o el caso de complicaciones obstétricas que demandan una importante cantidad de transfusiones.
En cuanto a la frecuencia de donación, esta puede ser cada dos meses. Sin embargo, con hacerlo al menos dos veces al año ya se está realizando un aporte muy valioso a la comunidad. “El objetivo es incorporar la donación de sangre como una práctica habitual. Es necesario lograr que entre un 3 a 5% de la población sean donantes habituales, que donen 1 o 2 veces al año para tener la cantidad suficiente y así poder responder adecuadamente ante la habitual demanda”, explica el profesional. ¿Los requisitos para hacerlo? Ser mayor de 16 años, pesar más de 50 kg y estar en buen estado de salud. Como se ha explicado, hay condiciones especiales que son evaluadas antes de la donación para proteger al donante y al receptor. No deben haber padecido enfermedades transmisibles por transfusión.
Para finalizar, Fernández asegura que la situación actual de los bancos de sangre en el país es deficitaria, mucho más en la situación actual de pandemia donde muchas personas temen relacionarse en centros de salud o tienen dificultades para trasladarse. “Esto ha agravado notablemente la situación, con stocks en los bancos de sangre que muchas veces no pueden hacer frente a necesidades imprevistas. Sigue habiendo trasplantes, enfermedades clínicas (hemorragias digestivas), partos, etc. que hacen necesario el uso de la sangre y, sin eufemismo, podemos decir que la sangre salva vidas. Es un producto que no se puede fabricar, que no existe en las farmacias, que es perecedero y que su existencia solo depende de la concurrencia de donantes de sangre”, afirma:
COLECTAS EXTERNAS
Fundación Hemocentro Buenos Aires realiza colectas externas. ¿Qué son? Jornadas de donación de sangre voluntaria que se realizan fuera del ámbito físico del Centro Regional de Hemoterapia.
Se pueden organizar en escuelas, empresas, clubes, sociedades de fomento, instituciones religiosas u organizaciones civiles. Para más información https://www.hemocentro.org/organizar
DONACIÓN DE PLASMA DE CONVALECIENTE COVID
Escuchamos mucho en el último tiempo la importancia de donar plasma. ¿De qué se trata el procedimiento? ¿Quiénes pueden hacerlo? “El plasma de convaleciente es el obtenido de una persona que ha padecido COVID-19 y que posee suficientes anticuerpos para donar a aquellas personas que están transcurriendo la enfermedad. Se obtiene mediante un procedimiento llamado aféresis que consiste en la conexión a través de una aguja en la vena del donante a una máquina que separa automáticamente el plasma, restituyendo al donante el resto de los componentes de la sangre. De esta manera, se pueden obtener unos 600 ml de plasma que pueden ser transfundido a dos pacientes. Esto ha demostrado ser eficaz en la administración temprana de pacientes de riesgo. La donación por aféresis es un procedimiento muy seguro y rápido y puede ser reiterada después de una semana. Los procedimientos de aféresis son muy usados habitualmente para recoger plaquetas y esto permite obtener, por este medio, la misma cantidad de plaquetas que por medio de una donación de sangre normal, se obtendría de 6 a 8 donantes”, explica.
Requisitos:
- Tener un hisopado positivo de diagnóstico
- Que hayan transcurrido al menos 28 días del alta médica.
- Sentirse bien y recuperado.
- En el caso de las mujeres NO haber tenido hijos ni embarazos. Esto es porque en los embarazos se generan unos anticuerpos que se llaman HLA -sistema de histocompatibilidad- que estando presentes en el plasma pueden causar en el receptor injuria pulmonar, y lo que se busca es mejorar su estado pulmonar, no correr el riesgo de empeorarlo.
- Pesar al menos 60 kilos
- No tener alergia a la penicilina
- Tener entre 18 y 65 años
- No tener enfermedades preexistentes
Más info: www.hemocentro.org
Instagram: @hemocentro
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