MARKETING DE EXPERIENCIAS

El marketing es una de las disciplinas que más se va adaptando a los cambios de paradigma de las sociedades, ya que su principal objetivo es “impactar” en las personas para poder vender un producto o servicio. Si no se adapta, muere. Hace un tiempo que notamos claramente que no se venden más productos o servicios, sino que se venden “experiencias”. ¿Qué queremos decir con esto? Tal marca no vende un sillón, sino que vende un momento de tranquilidad en el rincón favorito del cliente. “El consumidor del siglo XXI, que es un consumidor claramente más informado, busca nuevas sensaciones, nuevas experiencias. Ya no compara productos o servicios sino qué tienen estos para ofrecerle como valor agregado, qué nueva sensación podrá experimentar con su uso”, explica María Fernanda Ipata, directora de Quásar Comunicación, para comenzar a entender este concepto.

Según explica, el marketing de experiencia es aquel que busca más que nada generar una emoción en el consumidor; apela a lo emocional, a lo que le pueda producir usar o contratar algún producto o servicio. Genera una conexión entre la marca y el consumidor. Apela a la vivencia, a generar un vínculo afectivo con la marca, más allá de lo objetivo que la marca otorga. Busca una sensación, un valor compartido. “Sin dudas en este marketing es el cliente el protagonista y se lo sitúa en el centro de la estrategia. Conocerlo, conocer sus gustos, sus valores, sus demandas, sus objetivos y sus necesidades pasa a ser vital para las marcas. Hoy la cercanía con el cliente y la identificación con él es la clave”, detalla.

 

CLAVES DEL MARKETING DE EXPERIENCIAS

Para crear una buena experiencia para los clientes, esta debe ser memorable y tiene que dejar huella. Tiene que ser lo suficientemente personalizada para llegar a cada consumidor ya que una experiencia memorable no es lo mismo para todos. Se debe buscar una experiencia a medida. “En mi último viaje por Misiones tuve una experiencia que disfruté muchísimo: me dieron un folleto (como cualquier folleto turístico) pero con la particularidad que tenía un código QR que te llevaba a una PlayList con temas de músicos locales. Entonces se disfrutaba del paisaje con música autóctona especialmente diseñada y pensada para ese momento, para ese lugar: para completar la experiencia. Me pareció una estrategia simple, económica y que con el uso de la tecnología es absolutamente posible para cualquier empresario o emprendedor”, ejemplifica Ipata.

 

ALGUNAS ESTRATEGIAS DE MARKETING DE EXPERIENCIAS

 

• CO-CREACIÓN. Se trata de involucrar al cliente en el proceso de diseño o elaboración del producto o servicio. Esta estrategia es muy efectiva porque combina personalización y participación.
• GAMIFICACIÓN. Consiste transformar un proceso clásico en una experiencia lúdica, de juego.
• STORYTELLING. Contar una historia es sumamente efectivo para lograr vínculo emocional. Esta debe ser atractiva, creíble y coherente.
• EXCLUSIVIDAD. Hacer sentir al cliente un privilegiado. Por ejemplo, una invitación a un evento exclusivo, una posibilidad diferencial solo para pocos de los que él forma parte.

 

Estas son solo algunas estrategias, hay muchas más. Y como concluye la especialista: “las estrategias tienen mucho que ver con la creatividad”. Por eso, para destacarnos en este mercado tan competitivo hoy debemos ser creativos y generar propuestas diferentes que le permitan al cliente vivir experiencias únicas y memorables.

 

También puede interesarte esta nota: https://www.experta.com.ar/blogg/marketing-sensorial/