AGILE, LEAN STARTUP Y DESIGN THINKING

¿Qué son y cómo funcionan estas metodologías?

Este año, sin dudas, el modelo de trabajo está atravesado por la transformación digital. Para algunas empresas resultó más fácil y para otras un poco más complejo y lento. Pero en todas ha sido el camino que seguir. Dentro de esta transformación, hay ciertas metodologías que ayudan el camino de eficientizar tareas, enfocarse en la resolución de problemas, mejorar resultados y tener una mejor adaptación al cambio. Hablamos específicamente de las metodologías Agile, Lean Startup y Design Thinking. Pero para aprovechar los beneficios de estas prácticas es clave entender su funcionamiento, conocer para qué sirven y cómo se pueden combinar entre ellas. ¿Descubrimos juntos de qué se tratan?

DESIGN THINKING

Quizás es la más famosa de las tres o de la que más escuchamos hablar. Es una metodología enfocada en la creatividad. ¿El objetivo? Aprovechar las habilidades de los profesionales para encontrar soluciones novedosas a las necesidades de las personas. Se centra en la resolución y la comprensión de problemas. Es potenciar la innovación en la empresa, con el enfoque puesto 100 % en el cliente.

Para lograr el objetivo de esta metodología es fundamental empatizar (y entender las necesidades del usuario), definir el problema que se busca resolver, idear (con brainstorming de todo el equipo), desarrollar un prototipo (básico de bajo costo pero que permite probar la viabilidad de la propuesta) y testear (probarlo en el mercado).

AGILE

Es un conjunto de valores y principios que los equipos pueden usar para tomar decisiones sobre cómo hacer el trabajo. Tiene su origen en el desarrollo de software. Hoy se aplica en varias industrias y la raíz de su filosofía radica en valorar más la respuesta al cambio en que seguir el plan. Agile propone ciclos de trabajo cortos (sprint) y constantes con pausas para evaluar los objetivos alcanzados y los pasos que se deben seguir. Es decir: aprender, ajustar y responder inmediatamente a los desafíos. Estos ciclos facilitan la flexibilidad de los equipos y, por consiguiente, la capacidad de adaptación al cambio.

Entre los valores que debemos prestar atención en esta metodología está: el enfoque en la solución, dividir el trabajo, experimentar en forma rápida y sin miedo y la mirada en el cliente.

LEAN STARTUP

Su foco está puesto en que los ciclos de desarrollo de un producto pueden acotarse y los negocios pueden dirigirse de manera más eficiente midiendo los procesos. La idea es hacer ajustes constantes en los procesos mediante un circuito de feedback (crear-medir-aprender).

El modelo Lean está basado en la experimentación y la aceptación del fracaso, entendiendo al fracaso como parte fundamental y necesaria del proceso para conseguir metas y desarrollarnos. Sus ejes se basan en el aprendizaje continuo, la experimentación, la medición y evaluación de los esfuerzos, la interacción y la rapidez.

¿CÓMO SE COMBINAN Y SE LLEVAN A LA PRÁCTICA?

Es importante entender que una metodología no compite con otra y pueden trabajar juntas. Y cada equipo o área de trabajo puede utilizar la metodología que mejor se adapta al proceso que están desarrollando o llevando adelante en ese momento.

Design Thinking estudia y explora el problema de las personas y se enfoca en cómo resolverlo. Lean Startup es un proceso posterior que se enfoca en el desarrollo fácil y rápido de un producto o servicio que cubra las necesidades del cliente con el objetivo de obtener retroalimentación y mejorarlo para una versión final más eficaz; trabaja en probar hipótesis. Por su parte, Agile avanza de acuerdo con las necesidades de la empresa y del cliente.